
Mi propia historia comenzó cuando tenía 19 años. En mi segundo año de universidad, encontré un circulo calbo y liso en la parte posterior de la cabeza. Me preocupaba, pero fui capaz de ocultarlo bien debajo de mi pelo largo y grueso. Pero cuando aparecio otro, y luego otros más, decidí que era hora de encontrar un médico. Así comenzó una serie de lo que parecía ser un experimento sin fin de cremas, pomadas, pastillas, e inyecciones. Nada funcionó. A los 21 años tuve que comprar mi primera peluca.
Estaba devastada! Yo siempre había sido una persona de fe, por lo que este fue un momento importante de crecimiento personal y espiritual para mí.
Mi primera peluca era sintética y rígida. Tenía clips metálicos que se afirmaban a cualquier pelo existente. Nunca olvidaré el día en que las alarmas del detector de metales del aeropuerto sonaban cada vez que yo pasaba cuando me iba camino a ver a mis padres a Chile, donde eran misioneros. Finalmente tuvieron que escanearme con una máquina portátil y el pitito sonaba en mi cabeza! Se imaginan la verguenza?
Después de unas cuantas malas pelucas, finalmente encontré una que me parecia un paso hacia adelante. En lugar de tener una maya como base, se usaba un plástico duro muy parecido a un casco. Yo estaba emocionada de probarla, pero resulto ser muy calurosa e incómoda. Tan pronto empezaba a sudar, la peluca empezaba a moverse y resbalarse sobre mi cabeza! Siempre me ha gustado hacer deporte, pero el día que me levanté de un salto y me di vuelta para hacer un tiro de baloncesto, y mi pelo siguio de largo... bueno, ya era hora de continuar mi búsqueda ...
No fue hasta que me casé y era maestra de una sala llena de estudiantes de primer grado que un milagro sucedió ... Encontré Freedom Hair! Yo, francamente, no podía creer la diferencia ... esto era más que un simple paso adelante, era un gran paso que me llevó volando por encima de cualquier otro producto que jamás había probado. La increíble seguridad que el Vacuum Hair Piece (Peluca de Succión) me ofrecía ... la belleza natural del cabello fuerte, saludable, verdado... la capacidad de escoger un estilo y cambiarlo como yo quisiera ... no podía expresarlo con palabras, sólo lágrimas. Podía nadar de nuevo, abrazar a mis estudiantes sin miedo, montar montañas rusas, ir a la playa, disfrutar de un día de viento ... para mi significaba vida, alegría, libertad ...
Eso fue hace más de 16 años ... Mi vida está llena de la alegría y la risa de mis cuatro hijos, a quienes educo desde la casa (homeschool), el gran amor de un marido que me adora con o sin pelo, de los amigos que saben que tengo alopecia, pero ni siquiera se recuerdan ... Yo nunca podría volver a otra cosa ... ¿cómo podría? Freedom Wigs realmente me ha liberado (Set Me Free).


